José María Ribal Torre
Explore Your Inner World
A partir de la canalización, el estudio y la creación, investigo el trasfondo espiritual de la vida a través de la literatura, el arte y la historia. Comparto lo que aprendo y descubro escribiendo y pintando sobre ello, e integrándolo en procesos de acompañamiento para el desarrollo integral individual, grupal y organizacional.
Después de muchos años de búsqueda y transformaciones, esta es la culminación de la manifestación de la configuración energética de mi Contrato de Alma. A lo largo de la última parte del proceso que me ha llevado hasta este punto, he sido guiado a través de una serie de experiencias místicas, visiones y símbolos canalizados.
Lo simbólico y la palabra
La tarea de toda mi vida ha estado centrada siempre en la palabra como vehículo de expresión, explicación y difusión de la dimensión simbólica de la existencia en este plano, es decir, de la conexión con el Alma y el Espíritu. Durante las primeras décadas, lo hice de una forma inconsciente e intuitiva. El primer anclaje de los dones y talentos que traje para desplegar mi Contrato de Alma se produjo cuando tenía 16 años y canalicé un escrito de 475 páginas sobre el análisis psicológico de los personajes de La Celestina, de Fernando de Rojas. A partir de la quinta década y, más concretamente, del séptimo septenio, cuando vivía en Estados Unidos, continué con esta tarea de una forma progresivamente más consciente y alineada con el descubrimiento, el recuerdo en realidad, de mi Contrato de Alma. En esta etapa, mi tarea está fuertemente asentada en la conjugación de las energías de mi nombre y de los nombres en inglés de mis proyectos que lo acompañan. Ambas lenguas son, para mí, un único sistema energético integrado.
Por eso, símbolos, textos y lenguas son lo primero de lo que te hablo. Por eso también, el blog es el núcleo de esta web, a partir de la cual podrás llegar, siguiendo los enlaces correspondientes, al resto de mis plataformas.
“FOLLOW THE SYMBOLS”
El domingo 27 de mayo de 2018 fue un día muy caluroso. Estábamos en plena ola de calor. Aquella noche, me desperté de madrugada empapado en sudor. Fui a la otra habitación, esperando que fuera un poquito más fresca y que pudiera dormir al menos unas horas. Cerré los ojos y, casi de inmediato, en un estado entre la vigilia y el sueño, tuve la experiencia mística que ha marcado mi vida desde entonces.
Vi aparecer en el cielo el símbolo Om, grande y brillante. Lo veía a través de un enorme ventanal. En cuanto lo vi, exclamé, en voz alta: “¡Oh Dios mío!” Sentí el impulso irrefrenable de ponerme de rodillas y empecé a llorar y a rezar, completamente abrumado por un absoluto sentimiento de amor, más intenso cuanto más se acercaba a la ventana y más grande se hacía el símbolo Om en el cielo. Estaba profundamente conmovido ante aquella presencia divina que sentí allí mismo, más grande, profunda y amorosa que cualquier cosa que yo pudiera ser capaz de imaginar, y de una intensidad imposible de transmitir con palabras. Entonces, desde detrás del símbolo Om, empezaron a aparecer muchos otros símbolos de diferentes tipos. Algunos los reconocí, otros, no. A medida que aparecían, se colocaron de tal manera que formaron un enorme árbol. No era un árbol corriente, sino un brillante árbol triangular blanco y dorado. Dentro de ese árbol triangular, estaban todos esos símbolos que salían de detrás del símbolo Om. Cuando el árbol triangular estuvo formado, oí una voz de una frecuencia, inmensidad, profundidad y gravedad imposibles de describir, que dijo “FOLLOW THE SYMBOLS”, “sigue los símbolos”. Después de eso, toda la visión se disolvió, sólo vi oscuridad y no me desperté hasta varias horas después.
Dos días después de esta visión, vi en el canal de Gaia dos entrevistas a autores de sendos libros que se habían publicado hacía ya unos años, de los que yo no sabía absolutamente nada. El primero era una descripción detalladísima de la llamada Numerología Espiritual de Moisés, un sistema de sistemas simbólicos canalizado por Frank Alper en los años 1980-1981. Se trata de un sistema para averiguar, para recordar, el Contrato de Alma de una persona, el cual se encuentra codificado en su nombre completo. Todo lo que el autor del libro explicó sobre este sistema resonó enormemente conmigo. Ese fue el comienzo de esta parte definitiva de mi camino en la que me encuentro ahora.
Justo después de esta entrevista, vi otra. De nuevo, se trataba de una persona hablando sobre un sistema de símbolos al que había tenido acceso a través de dos ángeles que se mostraron ante ella en la habitación del hospital donde su padre estaba a punto de morir. Ese sistema simbólico permite que una persona averigüe, recuerde, una serie de doce principios espirituales que trajo consigo a esta encarnación. Dichos principios están codificados en la Carta Natal, y la autora explica cuáles son, cómo descodificarlos y qué significan. Después de ver las dos entrevistas, pedí los libros.
No sabía qué iba a encontrar exactamente en ellos, pero sabía que esos dos sistemas simbólicos que estaba a punto de empezar a investigar eran, al menos, parte de los símbolos que debía seguir.
Los dos libros estaban escritos en inglés y no estaban traducidos al castellano, así que lo primero que hice fue aplicar mi experiencia como traductor y traducirlos de una vez al principio, porque sabía que todo aquello había llegado a mí no sólo para investigarlo, trabajarlo y asimilarlo, sino también para compartirlo, de una forma u otra que ya se iría mostrando. Mi ex-pareja y ex-socia y yo, además, adaptamos los contenidos del primero, el sistema del Contrato de Alma, a los nombres en castellano y catalán / valenciano, puesto que el sistema canalizado originariamente por Frank Alper está dirigido a la descodificación de los nombres en inglés.
A medida que el trabajo de traducción avanzaba y que empezaba a experimentar con aquellos sistemas simbólicos, empezó a ser evidente que eran sistemas vivos, abiertos, que se expandían y adquirían mayor profundidad como respuesta a la interacción con ellos. Y así ha sido desde entonces. Durante estos años, he ido recibiendo, mediante canalizaciones no buscadas, nueva información de ambos sistemas, que, de esta forma, se van expandiendo y profundizando aún más. Por otra parte, a medida que empezaba a conocer en profundidad mi propio Contrato de Alma, comprobaba que todo ese trabajo que estaba haciendo, y que continúo haciendo, es manifestación de algunas de las energías que lo componen, concretamente las del 12 - 3, 4 - 4, 5 - 5 y 7 - 7.
27 Símbolos
Cuando el trabajo con esos dos sistemas simbólicos estaba bastante avanzado, empezaron a aparecer otros símbolos. Aquí comparto los seis principales de un sistema de 27. Estos seis símbolos llegaron de diferentes formas: los dos primeros y el quinto, mientras dormía o en un estado intermedio entre la vigilia y el sueño; el tercero, mientras meditaba en un concierto en directo de música canalizada por Hildegard von Bingen; el cuarto, durante una meditación. El sexto y último está formado por la yuxtaposición del cuarto símbolo y otro más que recibí mientras estaba escribiendo. Juntos crean una espiral energética coherente que me ha estado sirviendo de guía en mi vida desde que los recibí. El último, además, contiene, simbólicamente, la información que pedí para tener una idea precisa sobre la esencia de la tarea que he venido a desplegar.
Con cada uno de estos símbolos recibí también un texto. Incluyo aquí una síntesis de lo principal de cada uno de esos textos.
Voluntad
“Esta es una energía para activar tu voluntad y tu capacidad de contribuir a la mejora de la vida de la Humanidad. Es una energía para activar tu fuerza para:
Contribuir a promover la unión entre los seres humanos.
Contribuir a restablecer el equilibrio en todo aquello en lo que se haya perdido o esté distorsionado.
Contribuir a la sanación de heridas individuales y colectivas.
La base de esta energía es el conocimiento y su aplicación en favor del bien.”
A partir del texto que acompañó al símbolo se llega a algunas referencias a divinidades de diferentes tradiciones espirituales, especialmente nórdicas y asiáticas que, fundamentalmente, representan los mismos arquetipos espirituales. Es, pues, también, un símbolo, una energía, de reintegración y síntesis.
Creatividad y recursividad
Esta es una energía de expansión hacia el Cielo y la Tierra y de conexión entre el Cielo y la Tierra. La expansión hacia la Tierra trae a ella energías espirituales expandidas. La expansión hacia el Cielo no termina nunca.
Esta es la conexión entre la fuerza, o la voluntad, y el corazón. Cuando esa conexión es armónica, lleva sanación allí donde es necesaria.
Esta energía se expande a sí misma y expande otras con las que se relaciona, y también crea nuevos caminos en momentos en los que otras energías están estancadas o bloqueadas. Se mueve libremente por cualquier campo energético y ayuda a restituir su potencia.
Es obvia la similitud entre este símbolo y la letra hebrea Beth. El texto que recibí con el símbolo tiene, en su estilo de expresión y sintáctico, algún rasgo con ciertas similitudes con el del prólogo de El Zohar.
El Camino del Corazón hacia la Completitud
Recibí este símbolo mientras meditaba escuchando una de las piezas de un concierto de música canalizada por Hildegard von Bingen, ofrecido en el Monasterio de Santa María de la Valldigna.
“La perfección de las formas no es lo importante. Eso es propio de un paradigma humano obsoleto, basado en lo superficial, en lo aparente, en lo que parece ser, pero no es. Lo importante es la energía contenida en las formas y transmitida a través de ellas.
Multitud de seres de luz nos asisten y acompañan para traernos las más elevadas energías, las más sutiles y amorosas, a través del amor, que todo lo traspasa. Vienen a ayudarnos a discernir de nuevo entre el Amor, el dolor, las obsesiones del ego distorsionado y las estructuras construidas desde él. Pero esas estructuras egoicas no son inválidas, no están vacías de significado y valor. Al contrario: son espejos en los que sus creadores pueden ver lo más profundo de sí mismos y, entonces, comprender y transformar”.
Tres secuencias de símbolos, de energías, surgen de este: una está relacionada con la sanación del Niño Interior; otra, con la sanación y reintegración de las energías masculina y femenina; la tercera está centrada en el reequilibrio de los diferentes tipos de polaridades que puedan existir. Los símbolos que forman esas tres secuencias llegaron de diferentes formas. Recibí algunos después de recibir este; otros ya los tenía, pero su significado sólo empezó a mostrarse después de que llegara este.
Energías espirituales bajando a la Tierra
Este símbolo no es nuevo. Forma parte de la serie de 22 símbolos visuales integrados en la Numerología Espiritual de Moisés, el sistema de sistemas simbólicos del que surge el Contrato de Alma. En una meditación, recibí insertada la imagen del número 16 y la sensación energética de las palabras “Contrato de Alma”. En ese sistema, este símbolo es “el símbolo de energías espirituales bajando a la Tierra a través de ti, para darles significado y expresión material de forma que sean accesibles para todos”.
Es, claramente, un mensaje directo, un encargo, más aún teniendo en cuenta el punto de la secuencia de símbolos recibidos en el que aparece, después de los tres anteriores, que son una secuencia coherente en sí mismos, y antes del que hace referencia a un nuevo ciclo de creación.
Nueva Creación
Este es un símbolo del nacimiento y renacimiento de la vida. Es origen de vida y vida en origen. Este origen de vida es cósmico y también interior, individual y colectivo. Es nueva vida en la Tierra y en los seres que la habitan.
Es la base de un nuevo ciclo de símbolos referidos a una nueva cosmología basada en los elementos, diferente de las cosmologías conocidas hasta ahora. En esta cosmología, la complementariedad es un valor esencial. No es un valor nuevo, pero es básico aquí. La interdependencia y la colaboración, dentro de un sistema poliédrico, polifacético, multidimensional, en el que cada esencia energética tiene su lugar y su función, su potencial y su manifestación, su posición relativa respecto a otros, en armonía estructural y funcional perfecta.
Es un nuevo mensaje de un nuevo inicio, que puede presentarse de infinitas maneras diferentes, todas válidas y significativas. Cada manifestación será la propia de cada individuo y de cada colectivo y será resultado del potencial creativo nuevo, diferenciado, único, de cada uno de ellos.
Es generación más consciente de vida más consciente. A partir de ese punto, cada cual puede acceder a su propio potencial y a su propia capacidad creadora.
Mi tarea
Poco después de recibir el símbolo anterior, llegó la configuración de líneas y flechas que aquí aparecen supespuestas a él. La integración de ambos contiene varias capas de significado que voy desentrañando, interiorizando, asumiendo y aplicando. La esencia de las energías del 3 (comunicación desde el espacio interior), del 4 (recepción y duplicación) y del 5 (innovación y su expresión) son las fumdamentales aquí.
En general, representa, contiene, (me) explica y activa los principios, el proceso y la estructura de creación y entrega de los proyectos y resultados de mi tarea. La esencia de esa tarea es la percepción (por canalización, percepción intuitiva o estudio) de energías espirituales; la elaboración de lo aprendido o descubierto para hacerlo lo más comprensible posible; y la transmisión, a través de la escritura, la pintura o procesos de facilitación individual, grupal u organizacional.
Las energías espirituales con las que trabajo están centradas en tres aspectos de la Energía de la Consciencia Crística:
La Unidad
El reequilibrio y reintegración de las energías masculina y femenina
La sanación de las relaciones individuales y colectivas
El camino recorrido hasta aquí
El Destino de Alma de mi Contrato de Alma incluye “hacer y aprender tanto como sea posible, ya que todo queda retenido en la memoria celular”, y está anclado en las energías del binomio 12 - 3, energías de constante expansión de la mente y el corazón (12) y de comunicación y enseñanza (3). Para buscar un razonable equilibrio entre las energías masculina y femenina, es necesario que los dones y talentos y el flujo de la intuición sean consciente e intencionalmente entrelazados con un trabajo estructurado y sistemático de exploración y aplicación, idealmente combinando el aprendizaje guiado por los maestros que forman parte de la vida de una persona con el aprendizaje autodidacta, despertando, nutriendo, expandiendo y fortalenciendo el maestro interior.
Formación en centros de estudio oficiales
Actualmente, candidato a Doctor of Philosophy in Holistic Theology.
Actualmente, candidato a Bachelor en Lenguas Clásicas.
Master of Science in Organizational Developoment. American University / NTL, Washington, DC.
Human Interaction Laboratory: Transforming Interpersonal Relationships. NTL Institute. Washington, DC.
Máster en formación de profesores de Español como Lengua Extranjera. Universidad de Barcelona.
Licenciatura en Filología Hispánica (especialidad Literatura). Universidad de Barcelona.
Healing With The Arts Program. University of Florida.
Cross-Cultural Leadership. Intercultural Management Institute. American University. Washington, DC.
Formación completada en centros de estudio independientes
Soul Contract Reading Training. Walton-on-Thames. United Kingdom.
Curso de Antroposofía: La Evolución del Ser Humano manifiesta en la Mitología, el Arte y la Filosofía.
Máster en Psicología Transpersonal. Escuela Internacional de Psicología Transpersonal, Valencia.
Programa de Formación Continua en Psicología Transpersonal. Centro Transpersonal de Buenos Aires.
The Alchemy of Symbols. Centre of Applied Jungian Studies, Cape Twon, South Africa.
Art as a Path of Inner Schooling. Centre of Applied Jungian Studies, Cape Twon, South Africa.
Meditative Painting to Heal Your Life. Whitney Freya Studio.
Alimentación Holística y Desintoxicación. Escuela Bienestar Integral. Madrid.
Sintonizaciones Arquetípicas. Luís Ruíz Aja y Centro Luz Interior. Valencia.
Consciencia expandida: regresiones y vuelos expansivos. Mayla Escalera. Madrid.
Numerología Qosmica. Samuel Valdivia.
Re-parent Your Inner Child. DailyOm.
Inner Child Healing. Center of Excellence.
Crystal Healing. Center of Excellence.
Healing Mantras for Anxiety and Depresion. DailyOm.
La dinámica de la familia Interna. Instituto de Terapia Gestalt. Valencia.
Formaciones parciales, hechas de forma guiada, autodidacta o mixta
Estudios de Doctorado. Enseñanza de Español como Lengua Extranjera. Universidad de Barcelona.
Primer curso de Sociología. Facultad de Teología. Barcelona.
Primer curso Diploma en Astrología Psicológica (Center for Psychological Astrology, London).
Primer curso Diploma en Astrología Esotérica. Star Wise Center, New Zealand.
Primer nivel de Reiki. Centro Transpersonal Re-conócete. Valencia.
Mndfulness (Programa MBRT).
Teatro, títeres, teatro terapéutico (Classika Theatre, Washington, DC).
El itinerario profesional de trabajo
Actualmente, creador del proyecto Reconecta & Reconnect.
Co-creador del Centro Transpersonal Re-conócete, junto con Carolina Teodoro.
Fundador de Crowdeduca, la primera plataforma en español de crowdfunding para proyectos educativos con alma.
Coach de Equipos y Consultor Organizacional en Philadelphia, Washington DC, Ottawa y Barcelona (proyecto Open Your World).
Coordinador del Philadelphia Small Business Network.
Consultor organizacional especializado en rediseño de centros educativos (Washington DC, Philadelphia y Barcelona).
Miembro del equipo fundacional de High Tech High San Diego, la primera escuela charter estadounidense enteramente basada en Aprendizaje Basado en Proyectos.
Tutor particular de Latín (Barcelona) y profesor de Latín en Wakefield High School y para adultos en Arlington County (Estados Unidos).
Profesor de Español como Lengua Extranjera en centros de secundaria en Estados Unidos.
Profesor de lengua y literatura en castellano en enseñanza secundaria en España.