La tarea

(Canalizado el 13 de enero de 2020)

Vas a recibir mensajes muy concretos, muy precisos, de Seres Avanzados de Luz que quieren transmitir y extender su sabiduría. Los canales serán diferentes, pero tu labor será siempre la misma: recibir y compartir. No es necesario explicar pero sí puedes elaborar desde la voz interna que te proporciona la certeza de que lo que recibes y lo que crees intuir es verdaderamente recibido e intuido y no fabricado por tu mente egoica. Uno de los canales ya lo has conocido y es el de la traducción. Habrá más, pero no lo decidirás tú. Lo reconocerás, como hiciste antes. El dinero no forma parte de esto, aunque no te faltará. Otros canales se irán mostrando, como el de las cartas, que se reactivará porque ahora comprendes mucho mejor cuál es tu tarea y que tiene un sentido que va más allá de tu comprensión racional. Por eso debes tener fe, mantenerla, alimentarla, sentirla y también contribuir a expandirla dando crédito a lo que recibes y expandiéndolo, transmitiéndolo, compartiéndolo, tal como lo recibas y de inmediato después de recibirlo, sin dejar que las dudas te bloqueen, te retrasen te entorpezcan o te detengan. Cuando lleguen los mensajes, recíbelos con Amor y dales crédito. Compártelos de inmediato o a no tardar. Ahora ya sabes algunas formas de compartirlos. Sigue utilizándolas y ampliándolas, porque otras irán apareciendo para que las utilices. No tienes que buscarlas. Se mostrarán ante ti. Solo tienes que estar atento.

Ahora mismo, en este mismo momento, entiendes aquella conversación con tu profesor Pascual, en la que descubriste y declaraste y activaste tu pasión por compartir lo investigado. Ahora se te pide que compartas lo recibido, aunque la tarea sea laboriosa, larga y lenta. Es tu cometido. Llevas mucho tiempo preparándote para ello. No desfallezcas ahora, porque ahora es ese momento hacia el cual has estado caminando desde pequeño, desde la redacción sobre el hambre, desde los personajes de La Celestina, que te resultaron tan familiares porque ya los conocías. Tú estuviste allí con ellos antes. Ya sabrás cómo, si es necesario que lo sepas. Debes tener fe. Ten fe y confía. Abraza tu cometido y entrégate a él.

Te estamos esperando.